Esta semana nos convoca Pepe, bajo el tema Mi Miedo Y Yo. Si
queréis disfrutar del placer de leer más relatos los encontrareis en su blog DesgranandoMomentos.
Apaga el ordenador, esto es una tontería y de las grandes. Menuda
idea has tenido. Deja eso anda, que vas a llegar tarde. No lo hagas. No puedes
hacerlo, crees que sí, pero no. Además, hacer eso es como suicidarse, tu vida
ya es feliz, no necesitas complicaciones absurdas. ¡NO! No lo hagas, no lo
compres. Nos conocemos demasiado bien y acabas de tirar ese dinero por la borda,
no eres capaz de hacerlo.
Mira cuanta gente inconsciente hay dando vueltas con sus
maletas, sin saber que van a acabar siendo papilla. ¿Ves lo que te decía? ¿Has
visto lo grande que es ese trozo de metal? Ni siquiera sé cómo puede subir tan
alto. Por no mencionar que un minúsculo fallo y ¡CATA PUM! Todos papilla.
En serio, date la vuelta, entra en razón. Ya te has
demostrado lo que tenías que demostrarte. Mira lo lejos que has llegado, eres
un valiente, pero no tienes por qué hacerlo hoy todo, no entres ahí, de verdad
que no merece la pena. Estarás feliz, ya estás sentado en el asiento. ¿Sientes
ese cosquilleo que te recorre el cuerpo? Pues esa es una señal muy clara de que
esto es un gran error. ¿Qué es eso que tienes debajo del culo?
Jajajajajajajajaja. Ay por favor… si es el cinturón, una tirilla de mierda,
esto es ridículo. Mira ya están entrando los últimos, van a cerrar las puertas.
Es el final, sal ya de aquí. ¡Sal ya! ¡Sal ya! ¡SAL!
Puffff, menudo susto me has dado. Por un momento he pensado
que lo ibas a hacer. Anda, dejémonos de tanta tontería. Coge el bus y vámonos a
casa.
Sino entendido mal , el miedo es subir a un avión es como si hubiera tenido una premonición de que algo iba a suceder ..
ResponderEliminarmejor ir por tierra aunque el peligro tan bien existe .
Un saludo.
Aerofobia, quizás sólo sea un paso a la vez, hoy comprar el boleto, mañana subir al avión y quizás poco a poco hasta mantenerse sujeto al asiento, supongo que ha de ser parecido a ese terror que tengo a las aguas contenidas, así sean treinta centímetros o tres metros me dejan paralizada, es espeluznante.
ResponderEliminarUn beso, Pikxi
¡Hola! Muy bien narrado, el miedo a volar es terrible, mira que estar en las alturas >.< me ha gustado mucho. Queda al final como que se ha ido por miedo o porque algo realmente iba a pasarle al avión. Me gusta.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Ha sido interesante ir descubriendo el miedo poco a poco.
ResponderEliminarUn beso.
Una forma muy original de contar el miedo a subir en un avión. Casi lo consigue, no debería haberle hecho caso a la vocecita interior que le dice que no lo haga, los miedos hay que superarlos.
ResponderEliminarUn gusto volver a leerte!
Un beso
jeje excelente relato del bombardeo de dudas y temores que aparecen en nuestra cabeza cuando la razón cae rendida bajo la inseguridad que nos provoca el temor que nos provoca lo desconocido.
ResponderEliminarUn abrazo!
Curioso ese paso a paso de narrar el miedo, como una voz dentro de uno mismo. Desde mi experiencia me pasa al revés: soy yo la que, cuando tengo miedo, me impulso mentalemente a seguir adelante... Aunque también está bien seguir los instintos para que no ocurra nada malo.
ResponderEliminar¡Saludos!
¡Qué te voy a contar yo! Lo entiendo, a mi me pasa lo mismo, es algo visceral, sin razonamiento, pero ahí está.
ResponderEliminarMe gustó mucho el hilo conductor y el final.
Un abrazo
Que bueno! La vocecita esa interior que no para, aunque la mayoría de las veces hay otra vocecita que nos grita lo contrario, a sido bastante divertido y muy bueno, besos.
ResponderEliminarLa voz del miedo yendo contra los deseos, los impulsos. Bien planteado el relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tal vez la vocecita interior tendría que haberle dicho que el avión es el medio de transporte con menos siniestralidad relativa y absoluta, pero dudo que ese argumento le hubiera hecho alejar ese miedo visceral al avión.
ResponderEliminarMuy bien narrado, Piksi.
Gracias por participar en mi convocatoria.
Hola, Pikxi
ResponderEliminarHe medio volado con tu personaje, me has hecho sentir ese pavor, ese miedo incontrolable al subir a un avión. Pensé que a pesar de la insistencia de esa vocecita se dejaria ir. Este miedo a veces puede ser premonitorio. Que bien que se bajo a tiempo. Muy buen relato, me gusto el humor en la trama.
Un saludo!
Magistral manera de poner el alma en vilo.
ResponderEliminarQue bonito lo has dicho, pero subirse a un avión es algo muy fuerte, que no se consigue cambiar de idea
ResponderEliminarfacilmente. Por surte yo no le tengo miedo al avión, porque mi hija casada lejos, que si no pudiera ie a verla, lo pasaria mal.Buena entrada, Pikxi. Saludos.
Pues eso, el alma en un hilo, se nos ha instalado tu miedo a las alturas. Genial!!
ResponderEliminarBesos
Un miedo bastante visceral y dificil de encarar jajajaja.
ResponderEliminarBesos.
comparto ese miedo.... que junto al de la altura no me había dado cuenta del problema en el que estoy ja...
ResponderEliminarsaludos...
Hola, pikxi:
ResponderEliminarMe ha encantando la agilidad subjetiva de tu relato: sólo leemos las impresiones de la narradora, sin descripciones que limiten nuestra imaginación. A lo ágil del ritmo, se une lo ingenioso del tono, al que impregnas de un humor con el que es imposible no evocar situaciones personales de autoburla.
Gran relato, pikxi.