LA VERDAD OCULTA

Hoy os relatamos algo escalofriante, sumamente importante para la humanidad, pero sobre todo para la que vive o viaja a la India. Hemos hablado con varios testigos que nos han narrado historias aterradoras sobre lo que allí ocurre, incluso algunos han tenido que asistir a terapia para hacer frente a los traumas causados por el aterrador escenario. También hemos intentado recopilar testimonios de las autoridades, pero han dado el silencio por repuesta. Nadie quiere contar nada, viven aterrados por las amenazas y consecuencias que acarrearía el hablar del tema. A pesar de ello, conseguimos que un militar hace años retirado nos cuente lo que ocurre, lo inimaginable de las circunstancias y el porqué el secretismo del gobierno sobre este conflicto, eso si, teniendo siempre presente la condición de total anonimato. ¿Qué es el causante de tanto miedo? ¿Porque el silencio del gobierno ante está trágica situación?


Para cerciorarnos de la veracidad de estos testimonios, hemos viajado allí, a la raíz del problema y jamás se podrían imaginar los que nos hemos encontrado en éste lugar, en el que la realidad supera a la ficción.

Bienvenidos a La Verdad Oculta, esta noche les desvelaremos la relación de los monos con los problemas de conexión a Internet. Empecemos.

Nos trasladamos a Málaga, allí una pareja de ancianos recién llegados de su viaje nos cuenta su historia. Ellos tomaron la decisión de recorrer mundo al jubilarse. Tras visitar varios países europeos, pensaron ir a la India, un lugar muy recomendado en todas las guías de yoga. “Al principio nos gusto mucho, era un lugar un poquito masificado, pero con una impresionante belleza paisajística, cultural y arquitectónica”. Todo parecía ir bien, el hotel en el que se alojaban tenía servicio de wifi, por lo que como cualquier otra persona haría, trataron de comunicarse con sus familiares mediante una video llamada. Pero esto resultó una tarea imposible, “bajamos a recepción muy preocupados y allí nos lo explicaron todo.”. Monos. Los simios en la India superan el 50% de la población humana. Una salvaje criatura que en principio no parecía preocupante, que incluso atraía millones de turistas, pero que pronto se convirtió en una de las peores pesadillas. “Nosotros habíamos visto varios monos por los lugares que visitamos, pero no les dimos importancia”.

Viajamos a la otra punta del país para recoger otro impactante testimonio. En Cádiz,  María o María flowerpower como la conocen sus amigas, nos cuenta su traumática experiencia en la India “Haber, yo viajé a la India porque mi mejor amiga Loli me contó que era un sitio super hiper mega way. Cogí mis 20 maletas de Luis Vuitton y a mi mayordomo y me dirigí al hotel más prestigioso que había. Y allí empezó la pesadilla”. Los simios, situados por todos los lugares, han desarrollado técnicas para interferir en las antenas de comunicación y repetidores que se expanden por toda la ciudad. “osea, yo intente abrir mis redes sociales para ver como estaba la gente y colgar mis fotos chachis pirulis para que los viera el mundo. Fue imposible. Todavía no lo he superado, allí aislada del mundo, sin internet, sin poder chatear con nadie, sin humanos con los que hablar, sin poder relacionarme con nadie… Como estar en una isla desierta sola con mi mayordomo y millones de personas más.” nos cuenta entre sollozos mientras le da un ataque de ansiedad solo de recordarlo. Esto, nos obliga a terminar la entrevista por recomendación de su psiquiatra, ya que poníamos en peligro su integridad mental.

Llamamos al consulado en la India con la intención de verificar los testimonios y recabar información. Tras varios intentos de nuestros redactores solo recibimos evasivas “Nosotros saber nada no, Jau. Monos india haber no, Jau. Amable gente nosotros, Jau.”. El silencio y el secretismo son absolutos, no comprendemos la razón de que se quiera ocultar la verdad sobre los terribles sucesos que espantan a la población occidental.

A través de un intermediario conseguimos contactar con un militar hace tiempo retirado. Tras insistirle estoicamente logramos una entrevista vía chat “Yo serví cinco años en la brigada antimonos. Al principio solo eran unos pocos y nuestro trabajo consistía en que no robasen a la gente sus vienes menos preciados. Las personas les cogieron cariño, les daban de comer, incluso venían turistas a visitarlos desde diferentes partes del mundo.” Si eran unos animales tan encantadores y adorados, ¿Cuándo empezaron los problemas? “Poco a poco se fueron multiplicando y esparciéndose por todos los lugares, robaban, ocupaban templos… causaban el desconcierto allá donde iban.” Decidimos hacerle la pregunta clave ¿Por qué el gobierno oculta estos sucesos? “Es un descontrol, los monos han conseguido hacerse con el control de las antenas de internet censurando así la información que llega. El gobierno ha utilizado las técnicas más violentas para intentar erradicar la plaga, pero han perdido la batalla y la guerra. No quieren que reine el caos entre la población humana y por eso no han comunicado nada y tratan de ocultarlo. Los simios han invadido India.”

Para comprobar la autenticidad de los testimonios viajamos al corazón de la India Delhi, una ciudad con aproximadamente una población entre un habitante y 14 millones. Nada más salir del aeropuerto nos damos cuenta de la crudeza de la situación. Están por todos lados, mires donde mires ves primates, observándonos, vigilando todos nuestros movimientos. Al llegar a la habitación del hotel decidimos verificar el echo de que internet funcione raro a causa de los simios. Encendemos el ordenador de mesa que nos hemos traído e intentamos fallidamente conectarnos al wifi, volvemos a intentarlo varias veces, pero no conseguimos alcanzar nuestro objetivo. Al mirar por la ventana descubrimos algo escalofriante que nos pone los vellos de punta, vemos decenas de monos subidos a las antenas interfiriendo la señal. ¿Cuál será la verdadera meta de estos animales?

Con muchas preguntas aun sin respuesta y con el temor de que los monos vuelvan a ser la raza dominante en el mundo, nos despedimos hasta el próximo programa. Buenas noches.